28 jul 2013

Veteranos de la involución

Existe una especie entre la fauna identitaria que resulta particularmente repelente. Es la que está formada por todos aquellos gurús, divas y nazis de salón que pululan entre nuestro particular ecosistema. La especie de los veteranos de la involución.

El veterano de la involución está en posesión de la verdad absoluta siempre y en todo momento. Hasta cuando parece que se contradice. Hoy puede autodenominarse federalista y mañana demonizar el federalismo. Puede criticar a todo aquel patriota que no le rinda pleitesía, y a la vez deshacerse en explicaciones y guiños a los antifascistas. El veterano exigirá a sus muchachos que se jueguen la cara por su partido, pero jamás arriesgará su integridad física. Es más, cuando el veterano de la involución se encuentra en una situación hostil, se transforma en un cruce entre una gallina y un reptil eunuco.

La denominación de "veterano de la involución" está reservada a personas que superan la media de edad del militante común, y que además miran por encima del hombro a los pobres mortales que en ocasiones se les aproximan. Es decir, uno puede salir de la nada y convertirse en veterano. Sólo es necesario comportarse como una diva inmortal. También puede ser veterano todo aquel nazi de salón con una posición social acomodada, que jamás se ha enfrentado con la chusma antifa, pero que se permite el lujo de despreciar al militante común por no poseer su formación.

Los veteranos de la involución no nos hacen falta. Nosotros luchamos todos por lo mismo. Nosotros somos quienes pegan los carteles, las pegatinas. Quienes pasan horas pintando pancartas. Somos quienes se han tenido que partir la cara en la calle. A quienes ficha la policía.  Nosotros somos la militancia. Somos la lucha.

 Hay siglas que sólo nos separan y nos debilitan. Antes de hacer castillos en el aire, programas farragosos o intrigas palaciegas, necesitamos construir un tejido militante sólido y organizado. Lo demás, son trabas.




"Constituyamos el cambio". Una frase que debería regir la conciencia de todos y cada uno de aquellos que desde muy jovencitos quisieron hacer algo más allá de lo establecido. Algo por el prójimo, algo que con el paso del tiempo se convirtió en luchar contra el sistema impuesto, en beneficio de la propia comunidad.
 Todavía recuerdo como si fuese ayer la determinación con la que soñábamos ser guardianes de la libertad, determinación que a cada uno nos ha hecho no retroceder nunca ante la provocación o la presión que hemos sufrido. Pero el tiempo pasa y por desgracia la voluntad de muchos ha decaído hacía estructuras convencionales, ya sea debido al miedo o a la desesperación.
 Darwin decía que la adaptación al medio era intrínseca a la supervivencia del más fuerte y que de ello dependía a su vez la evolución de las especies. Pues bien la adaptación en el ser humano ya no es al medio que nos rodea, sino a aquel que esclaviza, a aquel que subyuga, a aquel que nos condena a todos a la igualdad. Esa igualdad cuyo único fin y medio es la degeneración de todas las características que nos confieren fortaleza precisamente mediante la diversidad y mantenimiento de la distintas identidades raciales.
 El esfuerzo de este ente impronunciable, dueño del dinero, avaricioso por naturaleza, victimista por lucro, se dirige a masificar la debilidad como norma a seguir, ya sea a través del mestizaje o sencillamente mediante la directa esterilización, aceptando o tolerando conductas tan antinaturales como la homosexualidad.
 Pero esa es tan solo una de las pequeñas vías de destrucción masiva. La más preocupante está basada exclusivamente en lo que conocemos comúnmente como "mala influencia" o "moda".      Estas conductas degenerativas basadas en convenciones estereotípicas como la droga, la interminable fiesta o el desenfreno, el abandono escolar y tantas otras, han atrapado a una juventud ávida de desarrollo y evolución y la han convertido en la nada, en el conformismo más alienante, sin preguntas y sin destino. ¿Y qué es lo que nos queda? ¡pues resistencia feroz ante el ataque! Tan sumamente al alcance esta la solución que se puede llevar a cabo en la soledad de nuestra conciencia y en la ejemplaridad de nuestros actos. ¡Constituyamos el cambio siendo la generación que se impuso y negó vehementemente ser esclavos de la debilidad y del interés, queriendo ser bastión del futuro, supervivientes de un mundo en declive!  

25 jul 2013

¡Santiago y cierra!


¡PRESENTE!


La muerte nos muestra los peligros de nuestra lucha que tan fácilmente despreciamos; el recuerdo da sentido a la palabra “camarada”; el honor nos permite mirar a la cara a nuestros caídos sin avergonzarnos. Tu muerte, Eduardo, no será nunca olvidada. Ni perdonada. DEP
Eduardo García: ¡Presente!

13 jul 2013

Devastación

Llegaron y envolvieron las ciudades y los campos en fuego. Sólo dejaban muerte. Llegaron cuando Japón ya estaba derrotado y no tuvieron piedad. No traían paz, sólo hambre y horror.
Prohibieron izar la bandera imperial. Prohibieron hablar de las matanzas y de las violaciones. Hasta cuando se notificaban 300 violaciones al día. Nadie podía hablar. Prohibieron rezar. Una religión milenaria, que adoraba a los espíritus de la naturaleza y a sus antepasados, a sus héroes, estaba proscrita. El país de la libertad, el que traía la democracia, no toleraba que Japón tuviera alma. Atacó al corazón de su cultura y sus valores.
Los amos de la libertad humillaron a un pueblo para el que el honor está por encima de todo. Aletargaron a su juventud. Les dejaron sin nada.

Es curioso cómo una cultura tan alejada de Europa ha podido tener un destino tan similar. A nosotros no nos han quitado el pan ni han quemado nuestros campos. Pero también nos han arrancado el espíritu.

7 jul 2013

Católicos y orgullosos

Ya se nos ha olvidado hace tiempo. Pero España ha sido el país más católico del mundo. Más católico que Francia, Italia y el Vaticano. Más católico que el Papa. Cuando otros prestaban dinero, puertos y armas al moro, nosotros seguíamos plantándole cara. Aunque estuviéramos solos contra todos. Aunque fuera necesario saquear Roma para que el Papa espabilase. Los más católicos. Y los más temidos.
A nosotros se nos apareció Santiago Matamoros, como un trueno, cuando pensábamos que estaba todo perdido. San Isidro nos guió entre barrancos para sorprender a los Almohades. Gonzalo de Berceo nos contó cómo la Virgen señalaba a los judíos malvados en Toledo. La Virgen Inmaculada congeló un río entero en una sola noche para que la infantería española marchara, en silencio, sobre el hielo, y escarmentara al hereje. Nosotros hemos tenido un Rey Santo, capaz de vengar las afrentas del asesino Almanzor. La Virgen de los Milagros acompañó a Hernán cortés y a otros 500 españoles en Otumba, y les ayudó a vencer a 40.000 Mexicas. A nosotros nos ha protegido la Virgen del Pilar frente a musulmanes y franceses. La Virgen de la Victoria de Lepanto, la Virgen del Carmen, la Virgen Candelaria, el Cristo de la Legión,… Nuestro escudo portaba un águila en recuerdo de San Juan, porque éramos un país católico. Y durante siglos, en nuestra bandera lucía flamante un aspa, que no era otra que la Cruz de San Andrés.
Todos los pueblos españoles tienen una iglesia, una Virgen y un Cristo. Todas las Vírgenes de España representan la feminidad, la maternidad, el espíritu de sacrificio y la fortaleza. Y los soldados españoles, capaces de doblegar imperios enteros, se arrodillaban ante la imagen de una mujer con un bebé en brazos.

Hoy lo normal es despreciar lo católico. Hasta algunos patriotas despotrican contra la Fe de nuestros abuelos, de nuestros antepasados, de nuestros Héroes. Nadie puede influir en las creencias de nadie, pero eso no significa que se pueda faltar al respeto. Porque si alguno de esos anticatólicos tuviera que rendir cuentas ante Pizarro, Muñoz Grandes o Agustina de Aragón, es probable que, como poco, se llevaran dos collejas.

6 jul 2013

Adiós al consejo abortista



  Para los que no conozcáis el Consejo de la Juventud, se trata de una plataforma de “entidades juveniles” que se dedican básicamente a proclamar una sexualidad libre (si, esos personajillos que repartían preservativos en el instituto). Pues bien, también se dedican a proclamar el aborto de forma libre y gratuita, así como la distribución (también gratuitamente) y sin ningún tipo de restricción de la píldora del día después. El empujoncito perfecto para aquell@s jóvenes que no hayan decidido iniciarse en eso del sexo, se presenta uno de estos tipos en su clase, les da una charla sobre lo bonito y placentero que es tener relaciones, les proporciona anticonceptivos, y por último les dice; no pasa nada si no los usáis, pasaros por nuestra oficina que estaremos encantados de planificaros un aborto.
  Fuera de este ámbito también son entrañables, en su calendario se encuentran fechas dignas de celebración como el “Día internacional contra la homofobia” (donde se celebra la eliminación de la homosexualidad de las listas de enfermedades mentales por parte de la Organización Mundial de la Salud), el “Día de la visibilidad bisexual”, y uno de mis favoritos, el “Día contra la gitanofobia” donde pretenden engañar a la gente que lea su web con que hay países europeos en los que un 20% de sus ciudadanos viven atemorizados, víctimas de amenazas y palizas por ser gitanos…leer esta frase no sé si me ha hecho más gracia o me ha dado más pena (por aquello de que te tomen por idiota.)
 Y como no podía ser de otra forma para terminar su presentación, os diré que son fieles e incondicionales amigos de los inmigrantes y se afanan en difundir la riqueza que aporta una sociedad multicultural (os he ahorrado las fotos que iba a subir como buenos ejemplos de diversidad cultural para no herir sensibilidades.) No hace falta que diga que esto, y todo lo descrito anteriormente, ha sido financiado con nuestro dinero, concretamente 4,3 míseros millones de euros en tres años. 

  Bueno, y aquí viene la buena noticia; el gobierno ha decidido suprimir este Consejo, la mala noticia es que ese dinero seguramente ira para alguna otra idiotez, aunque dudo que más inútil.