27 dic 2014

NO PUEDE SER

La televisión no sólo es un asco, además es nociva, es venenosa. Y en personas particularmente sensibles, puede provocar reacciones espantosas. A mí, sin ir más lejos, podría darme un tabardillo algún día, viendo cualquier programa de la parrilla. Por eso me mantengo alejada de ese instrumento del demonio.
Pero claro, es imposible aislarse completamente de los medios de comunicación (medios de propaganda, más bien), y hace unos días, escuché accidentalmente una frase vomitada por uno de esos ilustres tertulianos que proliferan en todas las televisiones y radios. Uno de esos individuos que tan pronto opina sobre las últimas tendencias en ropa de entretiempo, como nos pone al día sobre los devaneos amorosos de la Pantoja de Puerto Rico, como se saca de la manga un análisis político de patio de colegio.
El personaje en cuestión estaba escandalizado con el Hogar Social Madrid:
"No puede ser que se utilice la caridad para cobijar el racismo. No puede ser que sólo den comida a españoles"
No puede ser, dice el colega...
No puede ser...
Lo que no puede ser es que aquí el extranjero tenga preferencia.
Que a nuestra gente se le nieguen ayudas que se destinan a inmigrantes.
Lo que no puede ser es que la prensa se dedique a difamar a aquellos que intentan ayudar al prójimo, al cercano, al de casa.
No puede ser que a nosotros, a nuestros padres y nuestros abuelos, que llevamos cotizando toda la vida, levantando este país, el sistema nos de la espalda y entregue todo aquello que tanto ha costado construir a una población ajena, invasora, que exige ser mantenida y desprecia nuestras costumbres.
No puede ser que los medios de desinformación voceen sin parar en contra de los patriotas, mientras rien las gracias al antifascismo patrocinado por el Estado.
No puede ser que el tema "ultra" sature los medios durante semanas por una muerte, cuando las bandas extranjeras provocan decenas de muertos al año, sin tener repercusión mediática alguna.
No puede ser que la televisión mantenga aletargada a una sociedad entera, mientras todo lo nuestro se derrumba.
No puede ser que España, después de resistir siglos de guerras, invasiones, piratas, reyes felones, reinas guarronas y hasta un rey pasmado, sea subastada por una clase política podrida.
Eso sí que no puede ser.

7 dic 2014

8 DE DICIEMBRE

Me niego a llamar a estas fiestas "el puente de la Constitución ". Ni siquiera "de la prostitución " o "de la corrupción", a pesar de que esa denominación se ajuste más a la realidad. Este es el puente de la Inmaculada. Punto.
Que ya sé que ya nadie es católico y que cada uno celebra lo que le da la gana,... y así nos va. Pero es del género idiota preferir la fecha en que se firmó la sentencia de muerte de España, para ignorar la conmemoración de una victoria épica... y de un milagro.
El 8 de diciembre es una de las pocas fiestas católicas que no cuadran con ninguna herencia pagana. Pero no es que ese día se celebre la Inmaculada porque a la Iglesia se le antojara. Es que aquel día, hace la pila de años, el ejército español se encomendó a La Virgen Inmaculada cuando estaba todo perdido y, mira tú por dónde, resulta que ganamos.
En 1585 estábamos en guerra contra el hereje allá por los Países Bajos. La propaganda antiespañola lleva desde entonces (desde mucho antes, en realidad) tachándonos de sanguinarios come niños. Que ellos mientan es hasta lógico, pero que nosotros nos lo hayamos terminado creyendo, es muy triste. La rebelión de los Países Bajos tiene más que ver con la pérdida de privilegios de los príncipes holandeses que con nuestra supuesta sed de sangre. Pero esa es otra historia.
Decía que en aquel entonces, 5000 soldados católicos defendían Empel. La cosa pintaba muy chunga para ellos, porque, aparte del frío que debía hacer por allí en diciembre, del hambre que estaban pasando con el asedio y del castigo de la artillería holandesa, resulta que los refuerzos no parecían llegar. Así que, como el mando holandés pensó que ya estaba todo el pescado vendido, ofreció a los españoles una rendición honrosa. Fue entonces cuando Francisco de Bobadilla, más chulo que un ocho, dijo aquello de "ya hablaremos de capitulación después de muertos". Sí señor. Y es que, en aquella época, ser español implicaba no agachar la cabeza ante ningún enemigo. Casi como ahora.
Y cuando nuestros soldados estaban ya en las últimas, rodeados de agua y de barcos herejes, encontraron la imagen de la Inmaculada. Hoy en día, encontrar un cuadro de La Virgen le habría dado igual a todo el mundo. Pero en el siglo XVI los españoles éramos de otra manera. Éramos tan diferentes que un hecho como ese les hizo confiar en la victoria, cuando no les quedaba nada.
Y aquella noche, de forma milagrosa, las aguas que rodeaban a los españoles se congelaron, y nuestra infantería marchó en silencio sobre el hielo y pudo sorprender al hereje en sus naves, y vencer en Empel.
De ahí que Holak, el almirante holandés exclamara: "Tal parece que Dios fuera español, al haber obrado tan grande milagro". Y bueno, no se puede negar que da la impresión de que, aquel día, alguien muy importante nos echó una mano.
Así que, hoy,  algunos, lo que celebramos es aquella victoria, aquel milagro. Es el día de la Patrona de Infantería. El día de la Inmaculada. Y punto.

16 nov 2014

MEDIOHOMBRE

"A un gran español,
abnegado servidor de la Patria,
invicto Teniente General de nuestra Armada.
Defensor de la grandeza de España.

Al gran marino universal
de nuestras tierras vascas.
Al gran hombre íntegro,
ambicioso en la excelencia,
desprendido de sus glorias,
indoblegable en el sacrificio.
Ejemplo de la victoria de nuestras virtudes,
en la más tenebrosa adversidad. Héroe de la España de ayer, de hoy y de mañana.

La Patria erigió este monumento
para que el recuerdo de su entrega sirva de ejemplo a las generaciones venideras."

13 nov 2014

NUNCA ME ABANDONES...

- Despierta ¡eh! Despierta
- ¿qué pasa?¿qué...?¿quién eres? ¿qué haces en mi cuarto?
- Tranquila. Soy tu ángel de la guarda.
-¿mi qué? Pues no tienes pinta  de ángel.
-A ver si te crees que a los fascistas os asignan un ángel convencional, guapa.
-No sé... de no ser por las alas y la aureola... qué quieres que te diga... vas más tatuada que yo. Y estás un poco hecha polvo.
-¿y qué esperabas, bonita?¿tú sabes la vida que me has dado? Peleas, carreras, cargas policiales, persecuciones, asaltos, contramanifestaciones... Y pensar que cuando me asignaron a una chica creí que me iba a aburrir...Pfffff... Inocente...
-Bueno, también habrás tenido vacaciones alguna vez. Que no siempre he salido de rositas, perdona.
-¿Estás de broma?¿vacaciones?¿qué es eso? Yo nunca me separo de tu vera. Claro que a veces has cobrado y te han roto la cara. Y da gracias a que sólo te has llevado algunos puntos y el cuerpo molido. Porque me he empleado a fondo, que si no, no lo cuentas. Que en más de una te ha faltado bien poco. ¿Te acuerdas en el 96, aquella panda de sharperos?¿y la noche que os salieron 100 antifas de aquella ocupa?¿y la vez que estuvo a punto de engancharos una turba en Vallecas?¿y cuando casi te apuñalan en el metro?¿y el día que...?
-Vale, vale. Que no tenemos toda la noche. Me queda claro. ¿No estarás aquí para convencerme de que cambie de vida y sea como los demás? Porque lo siento mucho, pero eso es imposible...
-¡Qué va! Ni se me ocurre. Si ya sé que no tienes remedio. Y además, allí arriba estamos todos de vuestra parte ¿qué te crees?
-Pues Dios a veces lo disimula bastante, no es por nada.
- Calla, calla. Que contento le tienes. El día que tengas que rendir cuentas, vas a tener que explicarle unas cuantas cosas, porque no eres precisamente una santa.
-Ya lo sé. Pero estoy segura de que Él me entenderá. Está todo controlado.
-Ya, bueno. Eso espero. Porque si después de lo que me está costando tu escolta, resulta que vas al infierno, apaga y vámonos.
-Oye, ¿tú puedes ver a todos los que ya no están con nosotros?
-Claro. Ellos también os cuidan.
-Por favor, diles que aquí no les olvidamos. Que les echamos mucho de menos y que son nuestro orgullo.
-Ya lo saben. Pero tranqui, yo se lo digo.
-Si no has venido para hacerme cambiar, ¿por qué me has despertado?
-Na, para desahogarme un poco. Si total, mañana pensarás que todo ha sido un sueño...
-Vale, pues hasta mañana entonces, que tengo que madrugar.
-Hasta mañana... ¡Ah! Y ya que vas a seguir en el mismo plan, ¿podías por lo menos dejar de conducir como una loca?
-Mmmhmmm...
-Vale, guay. Hazte la dormida. Vaya tela.
-Oye, muchas gracias por estar siempre ahí... nunca me abandones...
-Ya sabes: "ni de noche, ni de día"

12 nov 2014

La opinión de la mayoría se fundamenta básicamente en lo que salga por la tele. Esto es así. Aunque lo que digan sea una idiotez soberana, parece que dicho en labios del gran Wyoming o de Jiménez Losantos, todo cobra sentido.
La tele, la radio y las redes sociales son dios. Tienen el superpoder de la hipnosis y son capaces de llevarnos a hacer cualquier cosa, desde votar en un referéndum de chichinabo hasta ponernos bragas rojas en Nochevieja. Nadie está a salvo de su hechizo.
Millones de personas obedecen a los medios. Y los medios, cómo no, obedecen a sus amos, que son quienes están más interesados en mantener el borreguismo reinante. Y todo esto lo hacen de una forma endiabladamente infalible: nos hacen creer que tenemos toda la información a nuestro alcance. Que existe libertad de expresión y que aquí todo el mundo puede decir públicamente lo que quiera. Así que el españolito medio vive creyendo que se ha formado su propia opinión.
Pues nada más lejos de la realidad.
La opinión pública funciona exactamente igual que un guiñol infantil. Estamos todos atentos al espectáculo, como los niños pequeños, riendo y gritando según se desarrolla la función, coreando las consignas que nos dicen las marionetas. Estamos tan embobados con los títeres, que se nos olvida que a los personajes los manejan siempre los mismos. Que quien da vida a la bruja malvada con una mano, representa al valiente caballero con la otra.
Hace unos años nos hicieron la trece catorce con el cuento del 15M. Todo el mundo creyó que había estallado la revolución y que el sistema tenía los días contados. Resultó que la revolución, en lugar de estallar, se fue desinflando como un globo y que los perroflautas de la Puerta del Sol eran un nuevo tipo de marioneta del sistema: la válvula de escape del descontento popular.
Ahora están haciendo la misma jugada con el flamante "antipartido". Han puesto al señor de la coleta en todos los canales, desde la Sexta hasta Intereconomía. Horas y horas de propaganda intensiva y demagogia de parvulario, hasta que se ha convertido en el jefe del garito. La pesadilla de la casta para unos y el demonio rojo para otros.
Y estamos todos tan ensimismados con este nuevo truco que nadie ha caído en la cuenta de que seguimos mirando un guiñol. Que Podemos está donde está porque lo han puesto ahí los mismos que dirigen el sistema.
A nosotros no nos dan espacio en ninguna televisión. A los nacionalistas antisistema no nos entrevistan ni nos invitan a ningún debate. Las escasas ocasiones en que un representante de algún grupo identitario ha podido salir en antena, han sido apariciones fugaces, o se ha cortado "casualmente" la emisión justo antes de su intervención. Por no hablar de los gloriosos reportajes de investigación, con sus cámaras ocultas, sus frases sacadas de contexto, sus imágenes mezclando churras con merinas y su música de película de miedo. Todo un ejemplo de objetividad. Así es lógico que no exista el "movimiento nacionalista". Los únicos antisistema que hay, son los que dice la tele.
Pero una criatura del sistema jamás puede representar una verdadera amenaza para su amo.
Este sistema no tiene arreglo. No vale cambiarlo, ni reformarlo ni darle una mano de pintura. Tiene que caer desde sus cimientos. Y obviamente, no va a ser demolido por una de sus creaciones. Y tampoco va a desaparecer de la noche a la mañana, de forma ordenada y pacífica, ni por la presión popular, ni mucho menos por retwitear una frase ingeniosa.
Este sistema no es de izquierdas ni de derechas. Para sus dueños no existen fronteras ni leyes, y sólo responden ante la bandera del oro. Ellos inventaron esta democracia de pacotilla y no tiene sentido que pensemos que podemos derrotarlos jugando con sus reglas. La "política real" de los partidos del área es admirable y necesaria. Y todo aquel que se considere patriota debe colaborar con estos grupos. Pero no podemos olvidar que a los de la poltrona no los vamos a echar siguiendo sus normas. Que para que esto acabe, hay que actuar un poco más a la española y mandar los títeres a hacer puñetas.

18 oct 2014

Maternidad congelada


Cada vez que oigo hablar de ayudas a la familia, se me erizan los pelos de la nuca. Fundamentalmente porque más que ayudas, son limosnas. Migajas ridículas que requieren tanto papeleo y tanta justificación, que ni siquiera merece la pena solicitarlas.

Y eso en el mejor de los casos, porque también tenemos otra versión de las engañosas "ayudas": las que son una trampa. Las que se venden como grandes progresos y que efectivamente hacen progresar, pero no a las familias, sino a los cuatro listos que siempre salen ganando a nuestra costa. Y los reyes del mambo en este tipo de ayudas son las multinacionales chupi guays, como Facebook y Apple.

A estas dos empresas se les ha ocurrido el magnánimo gesto de pagar a sus empleadas el proceso de congelación de óvulos, para que así las trabajadoras puedan dedicarse al tedioso y molesto proceso de tener hijos cuando a la empresa le parezca oportuno.

Porque una de las máximas fundamentales de las multinacionales que dirigen nuestros destinos, de los medios de comunicación y de la sociedad moderna, es que la maternidad es una carga. Una condena insoportable e innecesaria.

Nadie parece darse cuenta de que lo que sí es una carga para toda la sociedad es estar al servicio de esas multinacionales a las que nuestro pueblo les importa un pito, y que sólo miran por sus intereses, por lo que nos puedan exprimir.

Por eso las familias son un problema, porque en el asqueroso mundo moderno que han creado esas grandes empresas, la prioridad no puede ser la familia. La prioridad tienen que ser los beneficios y la producción.

Resulta que ellos establecen el momento correcto, nos dan permiso para ser madres. Cuanto más tarde, mejor. Porque también se han encargado de hacer creer a todo el mundo de que ser madre joven es detrozarse la vida, por supuesto. Ese es otro dogma del mundo moderno: convencer a nuestras jóvenes de que un embarazo es peor que la sífilis. De que ser madre es absolutamente incompatible con ser libre, con divertirse, con ser feliz. De que para "realizarte como persona" es indispensable pasar un par de décadas de tu vida de fiesta. Aunque eso no sea vida, y tú dejes de ser persona. Es preferible reivindicar el "derecho" a asesinar a tu hijo antes de nacer, en lugar de luchar por darle un futuro digno.

Muy bien. Pues de parte de aquellas que una vez decidimos no hacer caso a todos los que nos aconsejaban que "interrumpiéramos" un embarazo por llegar en un momento inesperado, esas que nos hemos empeñado en sacar adelante a nuestros hijos cuando muchos nos tachaban de insensatas. De parte de las que insistimos en "destrozar" nuestro futuro, y comprobamos que habíamos tomado la mejor decisión de nuestras vidas. De parte de las que nunca acataremos los dogmas del mundo moderno, Apple y Facebook puede meterse sus cheques para congelar óvulos por donde buenamente les quepan.

Que ya sé que Silicon Valley está muy lejos de Europa y que a nosotras precisamente jamás nos ofrecerán uno de esos cheques, pero vamos a ver lo que tardan en aplicar aquí medidas parecidas o peores, porque somos los monitos imitadores de la sociedad yankee. Y en esa sociedad no caben ni nuestro concepto de familia ni nuestras tradiciones. Ese modelo de sociedad es el suicidio de nuestro pueblo.

12 oct 2014

EL ORGULLO

Puede que diluvie, granice, que haga frío o se desate la tormenta perfecta. Puede que haga un día de mil demonios. Seguirá siendo SU día.

Puede que las mentiras de una casta de estafadores hayan envenenado a todo un pueblo. Puede que muchos no sepan qué celebramos. Y puede que algunos lo sepan y no puedan soportarlo. Puede que todo parezca perdido.

Pero mientras tengamos sangre, seguiremos celebrando este día. Seguirá siendo el día de la Raza. El día de mi Patria. Y ni su odio, ni su cobardía, ni su poca vergüenza pueden cambiar que la nuestra es una tierra de Héroes, que España es sagrada y eterna. Que los que sentimos la Patria con cada latido del corazón, jamás dejaremos de pelear. Ni un sólo día. Así que hoy, esos traidores no existen. Hoy sólo existe el orgullo.

6 oct 2014

"...Don Juan blandiendo la espada, sobre la sangrienta popa,
tiñe las aguas de rojo como la pirata tropa.
Ríos escarlatas corren sobre la plata y el oro,
las escotillas se rompen y salen de lo más hondo
multitudes, miles de hombres, que trabajan bajo el mar
aturdidos por el sol, la dicha y la libertad.

¡Vivat Hispania!
¡Dómino Gloria!
¡Don Juan de Austria
libera a la Cristiandad!

Cervantes en su galera  vuelve el acero a su vaina.
Don Juan de Austria, a caballo, laureado vuelve a casa
Y ve una tierra cansada, un pedregoso sendero.
Cabalga en vano por siempre, loco, enjuto, un caballero.
Sonríe, no tal sultán, y envaina luego su espada…
Don Juan de Austria regresa de la Cruzada"

G. K. Chesterton
Lepanto

4 oct 2014

Leones y borregos

Madrid, jueves tarde. Una riada de universitarios inunda las aceras de la calle Princesa, a la altura del intercambiador. A 40 metros sobre sus cabezas, una imponente Minerva les da la espalda, desde lo alto del Arco de la Victoria.
Y menos mal, porque si la diosa de la guerra fuera testigo del desfile de niñatos afeminados que revolotean a sus espaldas, haría pasar su cuádriga sobre todos ellos: apocados, embobados, ñoños, horteras, pusilánimes, ... débiles.
Vivimos en un país en el que a los jóvenes no les importa pasar una noche entera en pie, mientras tengan drogas y alcohol (o estramonio), pero que no son capaces de ponerse de pie en el metro para ceder su asiento a una anciana. No digamos ya, ponerse en pie al escuchar el himno nacional. De pena.
¿Cómo hemos pasado de la juventud que salió de Atocha en 1941, vital, valiente, alegre, dispuesta a cruzar Europa sonriendo para enfrentarse al terror rojo, a la juventud de 2014, apática, cobarde, indolente, cuya idea de revolución se limita a su foto de perfil en una red social? ¿cuándo se han convertido los leones en borregos?
Miro hacia otras "culturas" y veo jóvenes salvajes, brutales, crueles. Viviendo en regiones del mundo donde la vida humana no vale un pimiento. Habituados a seguir la ley del más fuerte. Y según esa ley universal, nuestros chavales son lo más blandito de este planeta. Si algún día se produjera un choque entre ellos, los nuestros no sólo no tendrían ninguna posibilidad, sino que ni siquiera ofrecerían la más mínima resistencia.
Con lo que hemos sido...
Ahora que se acerca el aniversario de la Batalla de Lepanto, pienso en lo poco que tienen que ver nuestros muchachos con los jóvenes de aquella España.
En Juan de Austria, que con 24 años ya era  vencedor de las Alpujarras. Ahí es nada.
Capaz de sofocar la rebelión de aquellos moriscos que ni querían hablar castellano, ni aceptaban nuestras costumbres (¿de qué me suena esa actitud?), y que además colaboraban con los sanguinarios piratas turcos que asolaban nuestras costas.
O el joven Cervantes, que a los 24 años ya había tenido que salir pitando de España por escarmentar a un bocazas que había faltado al honor de su hermana. Y que en cuanto pidieron voluntarios en la Liga Santa, para dar una patada en el culo al turco, no se lo pensó un segundo.
O todos los jóvenes que luchaban con los Tercios, todos los caballeros que aguantaron en Malta, todos los soldados que combatieron al turco en el Mediterráneo...
Hoy nuestra juventud se lamenta de haber expulsado a los moriscos y no entiende por qué fuimos a molestar a los pobres otomanos. Piensan que debimos buscar otra forma de entendernos.
Muy probablemente, los cristianos que fueron quemados vivos durante el levantamiento de las Alpujarras, tenían otro punto de vista.
O el gobernador de Famagusta, que tras firmar la paz con los turcos, tuvo que ver cómo éstos se pasaban lo acordado por el forro y aniquilaban a toda su población, para luego desollarlo vivo, rellenar su piel con paja, y que así el sultán pudiera exponerla en los salones de su palacio. Las otras culturas y sus particulares gustos en decoración...
Los miles de esclavos cristianos que los turcos arrebataron de su tierra tampoco serían partidarios de la solución pacífica y "civilizada". Esos sí que sufrieron la represión en sus carnes, y no el puñetero "Alfon".
Pero esa gente y su sacrificio dan igual. Nada que no salga por la tele importa ahora. Con la juventud española sólo se puede hablar de series de moda, de programas de máxima audiencia o de redes sociales. Cuando sacas el tema de la Historia, o de la crisis de valores que está desangrando a Europa,  todos ponen cara de: "no me aburras", y desconectan de la conversación.
Así que espero que sea verdad eso que dicen de que en realidad el Islam no amenaza a Europa, que todo es un truco de Sión para confundirnos. Porque como a los morubes les de por intentar recuperar Al Ándalus, aquí en dos días está todo el mundo rezando a la Meca.
Aunque eso es algo que algunos no veremos nunca, porque va a tener que ser por encima de nuestros cadáveres.

30 sept 2014

Pippi y el rey negro

Primero fue Tintín y su aventura racista en el Congo. Luego les tocó a los Pitufos con su volumen "los Pitufos negros". La encantadora Abeja Maya también fue marcada con el estigma de los malditos cuando se hizo público que su creador era partidario del Nacionalsocialismo. Hasta Mortadelo y Filemón fueron denunciados por su cómic "el racista". Ahora le ha tocado a Pippi Calzaslargas.
Por lo visto, la pequeña hippie pelirroja era en realidad una malvada racista, dado que se refería a su padre como "rey negro" y a veces se dedicaba a hacer el chino. Abominable.
Gracias a Dios, o gracias a la omnipresente policía del pensamiento (mejor no metamos a Dios en este fango), se han recortado varias escenas de la serie para evitar el adoctrinamiento de los indefensos niños que puedan caer presas de tan deleznable propaganda fascista.
El afán por parecer políticamente correcto ha pasado del buenismo al servilismo más apestoso, y del servilismo apestoso a la ridículez descarada.
Nadie se libra del ávido bisturi de la censura multicultural. Hay cosas sobre las que no se pueden ni hacer bromitas, el holocausto y Alá, por ejemplo,son dos temas sobre los que es mejor no hacer gracietas, (pero esa es otra historia) y desde luego, las coñitas sobre otras razas están vetadas . Siempre que seamos los blancos quienes las hagamos, ojo. Todo el que sea más oscuro que nosotros puede hacer la mofa que quiera sobre nosotros. Tiene barra libre. Recuerdo cómo en el Príncipe de Bel Air y en otras series interpretadas por negros, era habitual reírse de los blanquitos, que siempre aparecían como bobalicones sin gracia ninguna. Y a nadie se le ha ocurrido nunca denunciarles por racistas. El racismo, en este maravilloso mundo multicultural, sólo se le puede achacar al blanco. Cuando lo hacen los demás, se trata de una reacción completamente justificada ante el maltrato secular que su raza ha sufrido por parte del hombre blanco. Poco es para lo que nos merecemos.

24 ago 2014

Adoctrinados sin salir de casa

Las autoridades sanitarias deberían advertir de que ver la televisión perjudica gravemente la salud. La salud mental, sobre todo. Es más, si a las autoridades les importara lo más mínimo nuestra higiene intelectual, ya hace mucho que habrían tomado medidas contra las productoras de televisión, sus grandes estrellas, guionistas, redactores y demás intoxicadores de masas.
Pero no lo hacen. De hecho, algún malpensado podría llegar a creer que las autoridades prefieren tenernos atontados, porque la programación parece diseñada para embotarnos la cabeza a todos.
Hay programas que son manifiestamente venenosos. Que sus espectadores saben que están viendo basura, vaya. Normalmente son programas de cotilleo, de entretenimiento pachanguero, espacios del tipo "busco pareja", o un popurrí de todo lo anterior. Lo dramático es que, por mucho asco que den, siempre hay millones de personas aparentemente normales que los ven.
Después tenemos programas que son tóxicos, que todo el mundo lo sabe, pero que inexplicablemente están considerados los guardianes de la verdad. Estos son los noticiarios,los debates entre pseudointelectuales y el esperpéntico periodismo de investigación español. Creando opinión a base de mentiras y sombras chinescas.
Aunque hay otro tipo de programas mucho más puñeteros. Entretenidos e inofensivos a primera vista, son en realidad una auténtica sesión de reprogramación a domicilio. Suelen ser series con argumento interesante, o con personajes simpáticos y cercanos. Sin embargo, muestran estereotipos muy estudiados: familias modernas (homosexuales), adolescentes alocados (degenerados), hombres sensibles (pusilánimes), mujeres independientes (hembristas), amigos exóticos (inmigrantes),... De esta manera,  todos cogemos cariño a ese tipo de personas, que en una sociedad sana, no serían consideradas como ciudadanos ejemplares.
Pero lo peor de toda la parrilla televisiva, lo más retorcido y cruel es sin duda la programación infantil.
Los dibujos tienen una estética cada vez más inquietante, con diseños que parecen sacados de una pesadilla, y muestran personajes que no tienen familia, o que tienen una familia con alguna anomalía exagerada. Los protagonistas no tienen padres (o aparecen fugazmente y muy ridiculizados), y todos los personajes que representan autoridad o disciplina son grotescos y malvados.
La mayoría de las series presentan como ejemplo a personajes cobardes, perezosos y maleducados. Se mofan de los que antaño serían considerados héroes y no respetan ninguno de los valores clásicos.
A nuestros hijos se les ofrecen unos modelos a seguir débiles, egoístas y malcriados. Justo el tipo humano que necesita el mundo moderno. Un poquito de ingeniería social de estar por casa.
Es alucinante cómo un pequeño electrodoméstico se ha colado en todos los hogares y ha conseguido moldear las conciencias de millones de personas a su antojo. Cómo se ha convertido en el alma de la vida cotidiana. Otra muestra de que el progreso hace mucho que se convirtió en una enfermedad mortal para nuestro pueblo. De que su "libertad" era una trampa, y nosotros caímos de cabeza. Y todavía no hemos tocado fondo...

20 ago 2014

LA MARABUNTA


Paseas por cualquier ciudad española y hay barrios en los que te sientes extranjero. Los inmigrantes se permiten el lujo de mirarte raro y todo.
En algunas zonas, hay tantos panchitos que a veces me pregunto si quedará alguien en Ecuador o en la República Dominicana. Convivir con su insoportable música, con su afición al agua de fuego y con la impunidad de sus bandas de mamarrachos, le da un nuevo sentido a la palabra "integración".
Luego tenemos a los moros. Sus mezquitas, sus mujeres disfrazadas de fantasmas, sus entrañables costumbres, su inestimable aporte al aumento de la delincuencia...
¿Y los chinos? Tan amables, tan trabajadores, tan numerosos... Capaces de reventar toda nuestra industria y nuestro pequeño comercio (con la generosa colaboración de nuestros gobiernos, por supuesto). Ya no existe un establecimiento de barrio que esté regentado por españoles. Sólo sus negocios, sus horarios maratonianos y sus artículos de calidad inexistente, son capaces de sobrevivir en este capitalismo voraz.
Sin olvidar a los zíngaros y su nula capacidad para vivir entre personas civilizadas.
Y en la tele... pateras, negros encaramados a la valla de Melilla, centros de internamiento atestados de negras preñadas, de africanos lustrosos, bien vestidos y manejando smartphones de última generación... gente que nunca se marchará de aquí. Que no tiene nada que aportar, pero que viene exigiendo. En un país que les ofrece médicos gratis, mientras nuestros militares y guardias civiles tienen que pagar por el servicio de urgencias de la Seguridad Social.
Y nadie dice ni pío. No vaya a ser. Pobre gente. Si sólo quieren una vida mejor. Si nosotros también hemos sido emigrantes...
Igualito.
¿Nosotros también asaltábamos la frontera alemana en manada?¿también había bandas de delincuentes españoles en sudamérica?¿llegamos allí en patera?
Y por favor, que nadie trate de hacer la gracia demagógica de comparar a los conquistadores con esta marabunta. Nosotros llevamos allí una cultura, un idioma universal, construimos universidades, catedrales,...
Nosotros no somos culpables de que otros países vivan en la miseria. La pobreza y las hambrunas han existido desde antes de que el hombre europeo conquistara el mundo. De hecho, en la mayoría de los países que nos presionan demográficamente y que una vez fueron colonias, la población vivía mejor entonces, cuando era gobernada por los grandes imperios, que ahora, bajo sus gobiernos "democráticos".
La idea de que nuestra conquista fue la causa de todos sus males es ridícula y desagradecida, igual que sería ridículo que nosotros lloriqueáramos por haber sido conquistados por Roma, en lugar de mostrarnos orgullosos de su legado.
Las culturas, a ver si les queda claro a todos esos llorones, se cimentan en la batalla. La vida es lucha, y el carácter de los pueblos se forja en la guerra. Pero es que además, la teoría ñoña de que los salvajes eran criaturas angelicales, poseedores de sabidurías casi mágicas, y nuestros antepasados, una panda de zoquetes desalmados, está tan alejada de la realidad que da risa. Basta con echar un vistazo a la historia de aquellos "angelitos", sus guerras civiles, matanzas y sacrificios. Basta con darse cuenta de que, mientras nosotros fuimos capaces de alumbrar el Renacimiento, ellos continuaban en la edad de piedra. Basta con usar un poco el sentido común y dejar de despreciar nuestra propia sangre.
Pero preferimos deleitarnos en la pena hacia el inmigrante. En la condescendencia. Preferimos sentir lástima por una gente a la que los nuestros le importan un pepino, en lugar de defender lo que tanto ha costado construir y que tan poco reparo tienen ellos en expoliar.
Nadie se plantea que Europa no puede acoger a todo el que pasa hambre. Que las campañas de apadrinamiento y donativos no funcionan. No podrían funcionar ni aunque todos invirtiéramos en ellas.
¿Nadie se acuerda de lo que le costó a Alemania occidental rescatar su mitad oriental tras la caída del muro?
Yo os lo resumo:
Alemania Occidental: más de 60 millones de habitantes.
Alemania Oriental: apenas 16 millones de habitantes.
Pues bien, recuperar la zona Oriental después de la nefasta gestión comunista, casi hunde todo el país. Y eso que la población oriental tenía una formación y unas infraestructuras bastante considerables.
En serio ¿alguien piensa que Europa puede ser capaz de salvar a miles de millones de personas sin formación alguna, que viven en países que no disponen de las infraestructuras más rudimentarias?
Confundimos solidaridad con papanatismo. Continuar destinando gran parte de nuestros recursos en tratar de integrar a quienes ni quieren ni es posible integrar, o a "desarrollar" países que nunca saldrán de la miseria (básicamente porque nuestras ayudas acaban en manos de sus corruptas castas dominantes), es del género imbécil. Esta mentalidad sólo sirve para fortalecer la globalización, que es la verdadera causa de sus desgracias y de las nuestras. Quienes nos hablan de igualdad,  en realidad nos ofrecen más injusticia. Quienes piden tolerancia, buscan debilitarnos. Y sólo una Europa de naciones fuertes puede romper los engranajes del mundialismo.
El que quiera inmigrantes, que los meta en su casa. O mejor, que se vaya a su país, a disfrutar de su tolerancia y de su cultura. Y que se los lleve a todos. Que aquí, además de inmigrantes, sobra mucho español idiota.

8 ago 2014

Los crímenes de los buenos

Es curioso cómo la propaganda puede convertir en víctimas inocentes a millones de personas que no lo son, y volver invisibles a millones de muertos, siempre que hayan sido asesinados por los buenos.
Porque cuando los buenos asesinan, saquean, violan y mienten, es por nuestro bien. Por salvar el mundo y todo eso. A la vista está.
Cada vez que los buenos han intervenido en algún conflicto para salvar el mundo, han masacrado y devastado todo lo que han podido. Pero de buen rollo, en nombre de la libertad y la democracia.
Así que esos muertos son como de mentira, como menos importantes. Por eso, cuando se habla de víctimas de la guerra, todo el mundo piensa en semitas famélicos, en niñas narigudas que escribían con boli y en chiquillos con pijamas de rallas y caritas de pena. Nadie piensa en los niños masacrados ni en las mujeres violadas en toda Alemania, en los soldados alemanes muertos de hambre en los campos aliados, ni en los japoneses encerrados en campos de concentración americanos.
Cuando los buenos bombardean un país porque sospechan que su gobierno tiene armas de destrucción masiva, nadie se plantea que son precisamente ellos los únicos que las han usado.
Cuando Japón homenajea a las víctimas de Hiroshima y Nagasaki, a nadie le importa que sus asesinos jamás fueran juzgados, que nadie rindiera cuentas por esos crímenes. Porque esos muertos no importan.
Los buenos han construido un mundo mejor sobre toda esa sangre. Sobre toda esa mentira. Un mundo donde puedes pensar libremente, siempre que pienses lo que te dice la tele. Donde puedes vivir libremente, siempre que hagas lo que te dicen los buenos. Siempre que consumas sus productos y no molestes. Un mundo feliz.

5 ago 2014

El amor de una madre

 
Luchemos por esa complicidad, por ese amor que se establece como una conexión única y natural entre una madre, un padre y sus hijos y que a su vez forma el sagrado vínculo primario de la comunidad: la familia.
¡POR LA FAMILIA!
 
Hay sonrisas que son capaces de salvaguardar e impulsar todo un futuro de gloria.

17 jul 2014

Dies Irae

Todos los años por estas fechas,  cuando comienzan a escucharse  protestas al Altísimo a causa del calor achicharrante, no puedo evitar recordar que hace 800 años, bajo este mismo sol inclemente, nuestros antepasados se batían a muerte contra el moro en un rincón de Jaén.
Todos los años pienso en aquella batalla crucial. En san Isidro echando un cable a los cristianos. En aquellos soldados infatigables. En la impresionante carga de los tres Reyes. En el calor insoportable que debía hacer en Las Navas de Tolosa aquel 16 de julio. Y en lo poco que se merecen todos los que pelearon aquel día que ahora estemos como estamos.
Porque cuando una empieza a ser consciente del circo que nos rodea, de lo bajo que hemos caído y del tiempo que hace que la Justicia se marchó de este mundo, recordar lo que tienen que estar pensando aquellos que fueron capaces de gestas como la de aquel día, es francamente sangrante.
Es entonces cuando la imagen del día del juicio final comienza a resultar atractiva. Pensar en que llegará un día en que todos responderemos de nuestros actos, ayuda a mitigar la rabia.
Obviamente, algunos están sentenciados a pasar la eternidad cociéndose en la cocina del infierno, por muchos argumentos que quieran presentar en su defensa ante Dios. Asesinos de niños, violadores, desalmados, genocidas... pero genocidas de verdad, de esos que han sido auténticos maníacos y gozan de las simpatías de este mundo moderno, el mismo mundo que llama genocidas a los héroes. Esos héroes nos esperan al otro lado. Porque Dios está con nosotros y a Él no le engaña la propaganda. Es lo que tiene ser Dios.
Sin embargo hay muchos millones de tontos útiles, de perezosos intelectuales para los que Dios no tendrá reservado tan terrible destino. Ya se sabe, es misericordioso y todo eso. Así que supongo que después del Día de la Ira, muchas feministas vociferantes se quedarán mudas cuando se encuentren con la reina Isabel de Castilla o con Mencía Calderón. Y a ver todos esos maricomplejines que opinan que la Conquista de América fue un abuso, cómo se lo explican a Cortés o a Pizarro. O qué cara pondrán todos esos borroquillas libertarios cuando conozcan a Blas de Lezo, sin brazo, sin ojo y sin pierna, pero más vasco y por supuesto más bragado que todos ellos juntos. Igual que los miles de fanáticos de la bandera tricolor cuando estén frente a Muñoz Grandes. ¿Y los defensores de la alianza de civilizaciones? Todos esos pelotilleros del Islam, los palmeros de los líderes bolivarianos, los amiguitos de los saltadores de la valla de Melilla ¿dónde correrán a esconderse cuando se encuentren con Cervantes, con Álvaro de Bazán o con Alfonso VIII?
Soñar con el Día de la Ira es bastante reconfortante de vez en cuando. Aunque no se nos puede olvidar que nosotros también rendiremos cuentas ese día. Así que no todo puede quedarse en soñar, porque si no espabilamos y hacemos algo por cambiar el panorama, seremos nosotros los que pasemos la vida eterna recibiendo collejas de todos los españoles inmortales.

11 jul 2014

Mujeres de armas tomar

Cada vez que pienso que esta sociedad ha alcanzado su punto máximo de degeneración, aparece alguna noticia que me hace comprender que todavía somos capaces de bucear más profundamente en el cieno.Después de una semana discutiendo con propios y extraños acerca del fiestón del "orgullo", del derroche pagado por todos para celebrar semejante dislate cuando no hay dinero ni para comer, de intentar aclarar a todo el que he podido que no se debe confundir lo natural (aquello que cumple las leyes naturales) con lo habitual, de hartarme de repetir que el hecho de que una conducta se haya producido desde que el hombre es hombre, no la convierte en algo bueno ni aceptable, de explicar que ese lobby es pernicioso para nuestra cultura y de casi llegar a las manos con algún que otro defensor de todos esos tarados,me doy de bruces con la noticia de la última moda en concursos "gastronómicos" en las discotecas españolas. Concursos en los que las participantes compiten degustando apéndices masculinos. Si en Estados Unidos hacen concursos de comer salchichas de frankfurt, aquí nos va más el producto nacional, por lo visto. Siempre han existido mujeres de moral distraída, pero todo el mundo estará de acuerdo en que el género femenino lleva una deriva más que preocupante. Hace mucho que las mujeres han decidido abandonar cualquier escala de valores respetable y sustituirla por la satisfacción de sus apetitos personales. Sí, el hombre también, pero da la impresión de que la mujer tradicional ha sido completamente barrida de la piel de toro. Y eso es mortal para nuestro pueblo. La mujer española siempre ha sido orgullosa y altiva. Ha sido luchadora y ha tenido un carácter endemoniado. Siempre se ha hecho respetar. En España no había nada peor que perder el honor, y ahora las chiquillas no saben lo que es eso.No es cuestión de ser un país de beatas, ni mucho menos. Es una cuestión de espíritu, de fortaleza. De entender que esta degeneración no hace libre a nadie, sino que destruye y debilita todo lo que somos. Es cuestión de hacerse valer, de actuar de forma que mañana tus hijos puedan sentirse orgullosos de ti. Es cuestión de combatir este mundo moderno en todas sus facetas. De demoler el modelo hembrista, egoísta y promíscuo, para recuperar la figura de la mujer española sobre la que se ha sostenido nuestra cultura desde el principio de los tiempos. Es cuestión de ser más mujer y menos moderna.

Unidad de acción

No piensas lo mismo que los demás. No actúas como los demás. Eres diferente. Sabes que tus opiniones van a provocar un silencio o una discusión. Y estás acostumbrado a rebatir a todo el mundo. A remar contracorriente.Eres diferente y lo sabes desde hace mucho. Desde el primer día que discutiste con un profesor y enmudeció toda tu clase. Desde aquel momento en que alguien te preguntó cómo te habías hecho una cicatriz y tú contestaste: "en una pelea". Desde que tus padres te miraron abochornados después de tu primer problema con "la justicia". Por mucho que ellos te reprendieran, tú sabías que tenías razón. Pocos entienden por qué sigues peleando. Por qué te juegas todo por tu idea. Por qué hay cosas que a nadie más le importan que a ti te hacen hervir la sangre. Todos los que estáis leyendo esto sabéis que sois diferentes. Sois tan diferentes que ni siquiera aceptáis una definición en la que incluir a todos "los nuestros". Aunque la base de nuestra forma de pensar sea idéntica, aunque todos estemos dispuestos a dar la vida por la misma bandera, resulta que no somos capaces de ponernos de acuerdo ni en lo más básico. Y mientras nos dedicamos a ponernos zancadillas y a mirarnos unos a otros con cara de malos, nuestra tierra muere. Y nuestro pueblo está recibiendo por todas partes. Esto no es un llamamiento a una unidad absoluta, no pedimos matrimonios ni juramentos de sangre. Pedimos una coordinación mínima e indispensable. Tener la capacidad de organizar actos puntuales, campañas genéricas, incluso golpes de mano simples y llamativos. Pedimos unidad de acción. No podemos seguir arrastrando decenas de cabezas de ratón mientras lo perdemos todo. Hay que abandonar el concepto de que la lucha es un club de amigos, porque lo que está en juego es demasiado importante. Y si perdemos, no quedará nada.

29 may 2014

Contra todo lo podrido

  Infinidad de veces oiremos hablar sobre la decadencia de Occidente -antigua cuna de la civilización- y muy pocas de las nuevas generaciones europeas comprenderán que se refiere directamente a todos nosotros como conjunto europeo racial, a nuestro presente y a nuestro futuro.
  Hemos pasado a formar parte de una comunidad que no se puede seguir llamando como tal.
  Somos el vacío de valores, contenedor oficial que alberga todos los grandes "beneficios" del progreso de la globalización y la masificación multicultural, preceptos logísticos instaurados por la democracia. Muchos están tan ocupados entregándose a la lascivia de la falaz libertad otorgada por ladrones y traidores que no se preguntan cuando cambió todo y lo más importante, ¿por qué?, ¿ cuáles son las razones del avance de este virus y cuáles los métodos de distracción? son preguntas que se nublan cuando empiezan a surgir, por que ya es viernes por la noche y toca fiesta, unas cuantas rayas acompañadas de buenos litros de alcohol y quién sabe en la cama de que desconocido acabar. Por ello los que sí conseguimos pensar de forma clara sin dejarnos llevar por todas estas distracciones degeneradas disfrazadas de libertad, seguimos y seguiremos luchando por construir un mundo nuevo, basado en todo lo positivo que hemos heredado de aquellos que fueron héroes, inventores y creadores de una estirpe orgullosa con un bagaje cultural superior e inigualable a ningún otro. Y por encima de todo sabemos a lo que nos oponemos y rechazamos rotundamente.
 Rechazamos el mundo moderno, base principal de la degeneración del ser, del individuo y que mejor que recordar las palabras de uno de los últimos valientes europeos que se opusieron de forma contundente al avance la de la moderna mediocridad social:

"  Cuando tantos hombres se hacen esclavos de su vida, mi gesto encarna una ética de la voluntad. Me doy la muerte con el fin de despertar las conciencias adormecidas. Me sublevo contra la fatalidad. Me sublevo contra los venenos del alma y contra los deseos individuales que, invadiéndolo todo, destruyen nuestros anclajes identitarios y especialmente la familia, base íntima de nuestra civilización multimilenaria. Al tiempo que defiendo la identidad de todos los pueblos en su propia patria, me sublevo también contra el crimen encaminado a remplazar nuestras poblaciones.

  Como el discurso dominante no puede abandonar sus ambigüedades tóxicas, les corresponde a los europeos sacar las consecuencias que de ello se imponen. No poseyendo una religión identitaria a la cual amarrarnos, compartimos desde Homero una memoria propia, depósito de todos los valores en los cuales podremos volver a fundar nuestro futuro renacimiento rompiendo con la metafísica de lo ilimitado, origen nefasto de todas las derivas modernas."
Dominique Venner
En su memoria y honor: ¡ODIO ETERNO AL MUNDO MODERNO!

21 may 2014

Prioridades

No permitas que la farsa te deslumbre. No escuches sus consignas. No caigas en su juego.
El mundo moderno quiere engañarte. Quiere hacerte creer que necesitas lo que te ofrece, que te hace falta tener muchas cosas. Comprar, usar y tirar. Coleccionar y desechar objetos. Y personas.
Dicen que todo tiene un precio, que lo importante es disfrutar, que sólo se vive una vez.
Pero eso no es vivir.
Todos sus reclamos son irrelevantes. Son el cebo para alejarte de lo trascendental, para convertirte en su esclavo.
No eres lo que tienes. Eres mucho más. No seas uno entre la masa. Lucha por ser mejor, más fuerte. Lucha por los tuyos. Por todo lo que había antes de llegar tú, y por lo que quedará cuando te hayas ido. Eso es lo único que de verdad importa. Lo que no puede comprarse.



18 may 2014

Portadores de la antorcha

Hay una escultura impresionante en la Ciudad Universitaria de Madrid, frente a la facultad de medicina.
Representa a un joven jinete recogiendo una antorcha de la mano de un moribundo. Y a los pies del monumento, una inscripción casi ilegible reza más o menos así:

"EL HOMBRE LLEVA LA SAGRADA ANTORCHA DE LA LEALTAD,
POR LAS CANDENTES ARENAS DEL DESIERTO DE LOS TIEMPOS.
LA MUJER LLEVA LA MATERNIDAD,
COMO ANTORCHA SUBLIME EN SU CAMINO.
CON AMBAS LUCES,
CULMINAN LA INCANSABLE TAREA DE LAS ALMAS ANTE DIOS,
HASTA LA ETERNA PUERTA DE LOS CIELOS"

Por lo visto, la escultura simboliza la herencia de la cultura. Una herencia que portamos hombres y mujeres a través del tiempo como si fuera una antorcha. El monumento habla de lealtad, de maternidad, de Dios... conceptos caducos y fuera de sitio, y más en ese lugar en concreto: en un campus desangelado, entre orines, pintadas y restos de botellón.
Porque parece que la juventud ha olvidado recoger esa antorcha. Reniega de su herencia. Nuestra cultura se apaga entre la desidia y el hedonismo de generaciones. Nadie quiere oír hablar de lealtad ni de maternidad, ni mucho menos de Dios.
Por eso la escultura está cubierta de pintadas, de símbolos feministas y lemas contra un gobierno tan vendido como el futuro de nuestra juventud.
Hasta han arrancado la antorcha de metal de la mano del moribundo. Ahora el jinete no tiene herencia que recoger. Ya no hay luz en ese "desierto de los tiempos".
Sólo aquellos que están dispuestos a mantener la llama de la cultura europea, pueden iluminar el futuro. Sólo quienes defienden esos conceptos que hoy todos desprecian podrán culminar esa incansable tarea de la que habla la piedra de esta escultura. El futuro pertenece a los portadores de la antorcha.